Que lo recaudado en canon por balnearios sea menor que lo que se eroga por guardavidas es algo más que un problema económico. Tanto como tener educación municipal, carecer de un sistema de salud eficiente o permitir que casi todas las líneas de colectivos pasen frente al Casino Central.
La gestión municipal que se va, conjuntamente con todas las anteriores del
Mar del Plata ha contado hasta ahora con el beneplácito de gobiernos nacionales y provinciales que han apostado a realizar importantes inversiones que hubieran merecido más reflexión.
El Estadio Mundialista,
La ciudad no se ha ocupado de eliminar la indignidad de los asentamientos sino de esconderlos en zonas no urbanizadas, es decir, sin servicios.
Continuar apilando basura que “alguien” prende fuego para hacer lugar a nuevas y nuevas camionadas es un tema económico para la concesionaria y el municipio y ecológico para todos, hay una decisión política ausente en cada medida que no se piensa en beneficio de todos o, mejor dicho, hay una decisión política que se toma en contra de todos para beneplácito de unos pocos.
Habitamos una ciudad donde más del 20% de la población tiene más de 60 años y eso no puede adivinarse ni en los colectivos, ni en los supermercados.
Calidad de Vida, Desarrollo Social o como quieran denominar a la importante Secretaría que asumirá María del Carmen Viñas después del 10 de diciembre estará lejos de cumplir sus objetivos si los encara exclusivamente con chapas, colchones o fideos.
Aún sin leer las predicciones de Horangel para 2008 puedo afirmar que sufriremos al menos 3 temporales el año próximo donde caerán cables y árboles, se destrozarán algunas viviendas y grandes sectores quedarán anegados por el agua. Creo que el horoscopero tampoco necesita contarnos qué barrios serán los más afectados como para que desde ahora se comience a trabajar limpiando arroyos, nivelando calles o requisando plantas.
Espero no ver nunca al intendente Pulti con botas de goma y capa de lluvia para establecer la imagen de un dirigente activo y preocupado.
La existencia de una educación municipal debe partir de un proyecto educativo singular y no de una cuestión administrativa acerca de que gremio representa a los agentes.
Voy a polemizar parcialmente con el intendente electo: no hay que reducir el staff político, que suena a la venta del avión de De
Si cada cartelera publicitaria tributara como la norma dice, faltarían menos recursos; si Inspección General trabajara para el fisco menos aún, si los cánones fueran acordes con las rentabilidades potenciales, menos, si Tránsito controlara también los días en que no hay periodistas bajarían los accidentes (y recaudarían), si el sistema de transporte urbano con sus modernas tarjetas magnéticas considerara la posibilidad de trasbordos habría más frecuencias, menos gastos para las empresas y seguramente la posibilidad de una reducción en el valor de los boletos.
Y el turismo… esta ciudad tiene la grandiosa fortuna de resultar atractiva para millones de personas que sueñan con pasar su descanso aquí. Vienen, usan, gastan, generan y se van. Algo siempre queda, aunque mucho se va de nuevo. Una correcta política sería pensar que lo que queda debe alcanzar para que los lugareños vivan mejor por una ecuación tan pueril como coherente: nadie puede ofrecer lo que no tiene y Mar del Plata no es una ciudad feliz por lo menos para unas 400 mil personas que, paradójicamente, viven mal en medio de este paraíso.
Adminístrenos señor Pulti, déjese de contar cuántas monedas le faltan a la caja, o piensa que el pueblo lo votó a usted porque sospecha que Katz es un amarrete. Tiene cuatro años de un crédito efímero, tanto que hasta un ruso pudo dilapidarlo en un santiamén.